Catt Ink: El tatuaje es una Búsqueda Interminable de Exploración en el Arte
Nuestra musa de agosto 2023 es una artista del tatuaje. Catalina Fuenzalida (27), conocida como Catt.ink, nos cuenta su visión de este oficio que ya desarrolla hace cinco años con mucho éxito. En esta entrevista conocemos sus opiniones sobre este arte, sobre su público y el sentido de hacer un diseño que tenga un significado y se complemente estéticamente en cada clienta/cliente.
¿Por qué nace tu inquietud por los tatuajes?
Siempre me gustaron los tatuajes. Un día me estaba tatuando y le empiezo a preguntar a mi tatuador ,como muy curiosa, acerca de los jabones que usaba la crema, las agujas y me puse a revisar sus cosas y a preguntarle qué era cada cosa. Me generó demasiada curiosidad tatuar, me acordé que en el colegio dibujaba demasiado. Ahí dije, qué bacán ser tatuadora. Él me dijo “yo te enseño” y me metió la idea y una chispa… No sé, una iluminación que me encantó. Entonces dije ya, voy a hacer esto. A modo hobby y me terminó encantando y me di cuenta que era buena, así que le di no más.
¿Cómo fue la experiencia de dejar una profesión "tradicional" por un oficio considerado socialmente alternativo?
Obviamente fue difícil, porque estudié demasiado. Estudié 8 años odontología en la Universidad de Los Andes, como para titularme y decir no me quiero dedicar a esto. Pero justo calzó con que me puse a tatuar y me empecé a desilusionar demasiado a la carrera. Tomé una decisión súper valiente de decidir si seguía en esto, porque igual me he sacado la cresta estudiando como para dejarlo a medias. Entonces dije “lo voy a terminar y va a ser mi mayor logro”. Siempre lo he dicho: terminar la carrera para mí fue mi mayor logro. Aunque el día de mañana esté tatuando y hoy ya sea hiper conocida, mi mayor logro siempre va a ser haber terminado la carrera. Así que fue difícil porque no fue fácil terminar la carrera, pero estoy muy feliz de haber tomado esa decisión.
¿Qué es para ti el arte del tatuaje?
Es un camino interminable de búsqueda. Al final uno ve desde afuera que un artista tiene una línea y un concepto muy definido pero, realmente es súper complicado llegar a eso. Entonces creo que es una búsqueda interminable de exploración en el arte para llegar a lo que son tus diseños, a lo que tú quieres expresar en base a tus diseños y también al mismo tiempo encontrar tu propio estilo de tatuaje. Porque hay muchos estilos de tatuajes. Mi estilo de tatuaje, por ejemplo, es línea fina. Pero además está el tipo tradicional, el blackwork, el puntillismo, líneas gruesas. Hay muchos tipos de tatuajes y esa búsqueda es justamente encontrar el intermedio entre el estilo de tus diseños con el estilo del tatuaje.
En este sentido, que prefieres, un tatuaje único, creado por ti o una imagen ya preconcebida por el o la clienta.
Obviamente voy a preferir que lleguen con los diseños que yo he hecho, porque al final significa que la gente viene con una total confianza de que les gusta mi trabajo y es mucho más personalizado cuando alguien decide a ciegas que les gusta algo mío. Pero, por otra parte, igual me gusta trabajar en base a ideas que trae la gente porque siento que se pueden desarrollar de una manera mucho más linda. Cuando la gente llega con sus ideas, uno siempre rediseña en base a esa idea. Uno intenta no ser una impresora de Pinterest, cosa de darle un sello único a esos tatuajes. Me gusta mucho ver lo felices que quedan al darse cuenta de que la idea que ellos trajeron, al ser rediseñada por mí, es mucho más linda. Así es que igual hay como un como una batalla entre qué me gusta más hacer.
¿Quién se tatúa más, hombres o mujeres?
En mi caso, como yo tatúo líneas finas y cosas minimalistas, creo que mi público es 99% mujeres. Te diría que debo tatuar como dos hombres al mes y el resto son puras clientas mujeres. Eso a mí me encanta, me fascina y he pensado incluso en hacer que mis tatuajes sean exclusivos de mujeres, pero digo, pucha, no les voy a cerrar la opción a esos hombres a tatuarse.
Me gusta mucho porque siento que cada tatuaje tiene su historia. Las más audaces sí o sí son las mujeres. Siempre que viene un hombre, siento que se quejan todo el rato comparado con las mujeres. Las mujeres aguantan mucho más el dolor, de todas maneras. Y en lo emotivo sí o sí las mujeres, porque nosotras nos comunicamos más y conversamos mucho más. Siento que al ser las dos mujeres confiamos más y conectamos. Y esa conexión durante la sesión hace que se dé una conversación, que ellas me cuenten por qué se quisieron hacer ese tatuaje, qué significa, qué tan importante es para ellas. Entonces siempre hay un trasfondo.
Me imagino que a veces tu sillón de tatuadora termina siendo el sillón de la sicóloga. ¿Te pasa mucho que a raíz de un tatuaje o una imagen termines siendo tatuadora/sicóloga?
¡Todo el rato! Yo siempre explico que una de las cosas que más me gusta es la conexión que uno genera con las personas. Es súper fuerte pensar que esas personas llegaron a mí por algo. Yo no creo en las casualidades y no creo que justo hayan llegado dateadas por alguien, o que hayan abierto mi Instagram, o que les haya aparecido algo. Siento que de repente he generado unas conexiones súper fuertes durante la sesión, en las que yo en el fondo terapeo a mis clientas y, muchas veces, también es hacia el otro lado. Muchas veces me ha tocado abrirme y desahogar mis cosas con alguien con la que simplemente tuve la conexión. Así como hay personas con las que tengo una conexión muy grande, también de repente pasa que hay personas con las que no conecto y es una sesión más silenciosa. Considero que está bien, igual siempre hay amabilidad por mi parte e intento hacerlas sentir más cómodas. También hay veces que a la gente no le gusta mucho conversar o, hay veces que yo no estoy en el mood de conversar y siento que aún así igual la gente se va súper agradecida de la sesión.
¿Crees que hay una edad para tatuarse?
Yo considero que sí. Para mí igual es importante que la gente sea mayor de edad a la hora de tatuarse, aunque sí tatúo a menores de edad con el consentimiento de sus papás. En este caso, los hago firmar un documento y el requisito es que tienen que estar ahí presentes con ellos. Es un procedimiento que si está autorizado por el papá o por el apoderado -el tutor- puede realizarse.
Pero, sin sonar anticuada, yo considero que es súper importante tener un juicio formado y un nivel de conciencia un poco más elevado para tomar una decisión sobre algo que es permanente. Esta opinión la desarrollé por experiencia, porque encuentro que todos los menores de edad a los que he tatuado a lo largo de mi carrera, eligen tatuajes que, yo creo, en 30 años más se van a arrepentir de habérselo hecho porque tomaron una decisión rápida y sólo por hacerse algo porque es lindo. ¿Se entiende? Al final cuando uno es adolescente, uno intenta llamar la atención, intenta tener algo que te distinga y eso te puede llevar a tomar decisiones como hacerte un tatuaje. He tatuado caritas felices, cosas que están de moda como el logo o el nombre de un grupo musical - que es un grupo musical que te gusta a los 16 – entonces, yo considero que sí es mejor tener una cierta edad para tatuarse.
¿Cuándo no recomiendo hacerse un tatuaje?
Siempre que hayan problemas médicos asociados. No recomiendo, por ejemplo, cuando la gente está tomando tratamiento para el acné, que es un fármaco que se llama isotretinoína. Cuando la gente está tomando anticoagulante, es mejor que traigan un pase médico para suspender el tratamiento tres días antes y tres días después. No recomiendo también hacerse un tatuaje cuando uno está embarazada. Y cuando hay de repente enfermedades no compensadas tales como diabetes.
¿Qué accesorios o joyas combinan al 100% con los tatuajes?
Me encantan las cosas minimalistas. Encuentro que cuando uno tiene tatuajes igual hay que pensar en el tatuaje como un accesorio. A veces cuando uno tiene muchos tatuajes es como tener muchos accesorios y al final, mientras más suavecitos, más me gustan. Y es justamente lo que intento lograr: que con una línea fina y con un tatuaje bien minimalista, sea un accesorio que no llame mucho la atención pero si viste muy bien, se ve muy bien. Por eso, encuentro que el complemento perfecto para un tatuaje es un accesorio muy minimalista bien simplecito, argollas lisas, nada con mucha cosa.
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